La Navidad es el momento perfecto para prestar a la cocina la atención que merece. Y de paso, darte una alegría a ti misma/o, porque, no nos engañemos, siempre hace ilusión darle un nuevo aire a cualquier espacio de la casa, incluido uno en el que, sobre todo en esta época, solemos pasar bastante tiempo. Si decoramos de Navidad la entrada, la sala de estar y el comedor, ¿por qué no hacer lo propio con la cocina? Además, salvo en raras excepciones, el espíritu navideño suele venir muy bien, refresca el alma y ayuda a estar más alegre. Así que déjate llevar y haz que llegue la Navidad también a la cocina. Aquí van algunas ideas para ello:
Adornos en la ventana
No es necesario (ni aconsejable) llenar todo el cristal de adornos, pero unas simples hojas de abeto, flores rojas o sencillas figuras darán un bonito y elegante toque navideño a la ventana. Puedes colgarlas de un cordel o sencillamente pegarlas con celo directamente sobre el cristal.
Una casa de pan de jengibre
La idea de hacer casa de pan de jengibre decorada con dulces es una buena excusa para pasar tiempo con nuestros hijos/as, ya que podemos decirles que nos ayuden a hacerla. Además de que el proceso de cocinado será divertido, el resultado dará a la cocina un toque muy original y, lo que es mejor, nos permitirá picar un poco de dulce de tanto en tanto.
Candelabros sobre la encimera o la isla de cocina
Uno o dos candelabros sobre la encimera o la isla de la cocina (en caso de tenerla), con sus correspondientes velas, prestarán un toque de elegancia y sofisticación a la estancia, y contribuirán a hacer más agradable el tiempo que pasemos en ella.
Coronas, no solo en la puerta
Las coronas no están reservadas exclusivamente para la puerta de entrada. Podemos colgarlas también en cualquier otro sitio de la casa. De hecho, colgadas en cualquier parte de la cocina, darán un resultado muy original y festivo.
Guirnalda(s) en la pared o el techo
Todo un clásico que nunca falla. Una o varias guirnaldas colgadas en la pared, el techo o cualquier mueble auxiliar, agregarán y colorido magia a la cocina. ¿Por qué renunciar a su encanto?
Un árbol de Navidad pequeñito
El hecho de tener un árbol de Navidad en el salón o la sala de estar, no significa que no pueda haber más en cualquier otra zona de la casa. De hecho, un árbol pequeñito o de mesa en un rincón de la encimera es una excelente manera de reforzar la atmósfera navideña de la cocina. Eso sí, en este caso es preferible optar por un árbol falso por cuestiones de limpieza e higiene.
Ingredientes cálidos sobre un tazón o centro de mesa
Si tienes una mesa auxiliar en la cocina, puede ser una buena idea colocar en ella un tazón grande o directamente un centro de mesa, con ingredientes o elementos cálidos y típicos del invierno (canela, piñas, bellotas y frutas secas) en su interior.
Luces colgantes
Unas luces elegantes colgadas sobre cualquier parte de la cocina, darán al espacio más alegría si cabe. Eso sí, opta mejor por las amarillas en lugar de las de colores para conseguir un resultado más elegante.