Si tus muebles son nuevos y sus materiales desprenden un olor desagradable que te impide empezar a disfrutarlos, descubre que puedes hacer para remediarlo de inmediato. Por el contrario, puede que el olor sea producido por el cúmulo de humedad durante el paso del tiempo y te contamos cómo deshacerte de ese tufo ¡de una vez por todas!
Antes de empezar la pelea contra el olor, se debe saber cuál es el causante. Así pues, deshacerse de un olor desagradable será más eficaz. Hay diversas razones por las que un mueble puede desprender olores.
Muebles nuevos.
Cuando compramos un mueble y nos llega a casa, algunas veces el olor de la madera denota y se hace perceptible por toda la estancia. Puede que, aún pasados unos días, sea difícil acostumbrarse, por eso buscamos una solución que no afecte al estado, pintura o características que presenta el mueble.
Hay varias maneras y herramientas efectivas para desvanecer el olor de los muebles nuevos. Al igual que hay métodos de acción rápida y otros que toman más tiempo en hacer desaparecer por completo los olores.
Ventilación, el método tradicional y que va de la mano de la paciencia, es el más común. Los muebles que se encuentren en una habitación que continuamente está siendo ventilada, perderán su olor de manera más rápida. Es un método solo apto para aquellos que puedan convivir con el olor durante un tiempo, ya que puede tomar más de un mes.
El bicarbonato sódico es el producto por excelencia en la limpieza del hogar debido a sus múltiples propiedades y aplicaciones. Entre estas, está la de acabar con los malos olores. La forma más eficaz es cubrir con bicarbonato en polvo el mueble para que absorba el olor. Pasados unos días, será necesario limpiar en profundidad la pieza con un paño húmedo.
Por otro lado, en el mercado existen productos con este fin para los diferentes tipos de madera, aunque no recomendamos su uso, te damos algunos consejos. El producto debe ser utilizado tal y como se detalla en las instrucciones, muchos de ellos necesitan que sea diluido con agua antes de comenzar a trabajar con él. Después de su aplicación, es recomendable mantener la estancia ventilada hasta que el olor del propio químico desaparezca y así pues desvanezca el de los muebles.
Muebles de cuero.
Otro olor muy característico es el que desprenden los muebles de cuero, un olor que no es grato para todos. Es conveniente saber que esto ocurre como resultado al tratamiento químico que se ha realizado en la piel. Los muebles nuevos de piel pueden emanar un olor molesto y al mismo tiempo, de los más difíciles de extraer, ya que los métodos que comentábamos anteriormente no funcionarán con el cuero.
La forma más segura y menos dañina para el producto es dejar que el olor se disipe sin ningún químico y con luz solar indirecta. Además de esta, hay dos maneras un tanto engorrosas que pueden ayudar a desprender el olor del mueble. La primera de ellas es cubrir el objeto de cuero es cubrir el mueble en hojas de periódico arrugado durante varios días hasta que el olor haya desaparecido. El segundo es un método eficiente pero aparatoso ya que hablamos de muebles de cierto tamaño. El café permitirá deshacerte rápidamente del olor a cuero nuevo. Para este remedio natural, habrá que introducir la pieza de cuero en una bolsa de plástico bien cerrada con granos de café y sin ventilación durante al menos 24 horas.
Muebles con humedad.
Es habitual que, en lugares húmedos, los muebles empiezan oler a moho, este hecho puede ser causado por encontrarse en una habitación con mucha humedad durante bastante tiempo. Si el moho ha atravesado la capa de tapicería, entonces será especialmente complicado deshacerse del olor.
Para abordar este tema, el primer paso es separar los muebles de las paredes y entre ellos, manteniendo las ventanas de la habitación abiertas, de tal manera que la ventilación sea posible por todos sus recovecos. La siguiente etapa es darles calor, o bien con un calentador, estufa o chimenea.
Los granos de arroz son excelentes absorbentes de humedad, sobre todo de aquella que se genera en los cajones de madera. Su aplicación es simple, colócalos en bolsitas de tela y después deposítalas en el cajón. Si se desea y de manera preventiva, se puede ir cambiando el arroz cada cierto tiempo y alargar así la vida de tus muebles.